IDEARIO AGUSTINIANO

IDEARIO AGUSTINIANO

El ideario o carácter propio expresa los principios educativos de nuestros colegios de agustinos. La opción por nuestro colegio implica que tanto padres de alumnos, alumnos, profesores y personal no docente respeten el Ideario y hagan posible la consecución de su contenido.

Este Ideario expresa los principales educativos básicos de nuestros Centros Docentes. La opción por nuestro Colegio implica que tanto Padres de Alumnos, Alumnos, Profesores/as y Personal no Docente respetan este Ideario y hacen posible la consecución de su contenido.

Identidad y misión:


 

La familia agustiniana y, en España, la Provincia de San Juan de Sahagún, tienen una larga historia educativa. Ello nos permite ofrecer a la sociedad una educación integral para que los alumnos perfeccionen todas sus potencialidades a través de un sistema de coeducación y de una gestión escolar participada por toda la comunidad educativa. Nuestro espíritu y estilo de educar siguen vivos y sintonizan con la sociedad actual y las demandas del mundo contemporáneo.

Las dos dimensiones del ser humano, complementarias para San Agustín, son la personal y la comunitaria:

  • Personal: Caracterizada como inquieta búsqueda de la verdad, por el camino de la interioridad, para llegar a la trascendencia. “Vuelve a tu corazón y desde él asciende a tu Dios. Si vuelves a tu corazón, vuelves a Dios desde un lugar cercano” (Sermón311,13)
  • Comunitaria: Que se concreta progresivamente en solidaridad-amor-fraternidad, porque necesitamos de los demás para ser nosotros mismos (cf. Comentarios al Salmo 125,13)

Así, pues un colegio de agustinos se significa por:

  • Un progresivo aprendizaje que conduce de forma gradual al conocimiento de toda la realidad, especialmente del saber del hombre y el saber de Dios.
  • Una sincera y noble apertura a todos los seres humanos – con independencia de cualquier diferencia económica, cultural o religiosa – para construir una sociedad más fraterna y solidaria en una creación que exige por parte de todos una ecología ambiental, económica y social, inseparable del principio del bien común.

Los colegios de agustinos incluyen en su visión:


 

  • Educar para el estudio, la reflexión y la interioridad con el fin de mantener un diálogo permanente entre la fe y la cultura, un descubrir las verdades que aportan la ciencia y la técnica, y, con la ayuda de la gracia, encontrar ” la verdad eterna donde el Maestro bueno y único instruye a todos sus discípulos”
    (Confesiones XI, 8,10).
  • Desarrollar la dimensión humana de la interioridad como lugar privilegiado para la plena humanización y para descubrir a Dios.
    “Es al hombre interior a quien habla Dios. Los oídos, los ojos, los restantes miembros visibles son morada o instrumento de alguien que mora en el interior” (Sermón 53, 15).
  • Promover dentro de la comunidad educativa la espiritualidad de comunión, que nos convierte a todos en condiscípulos que buscan y comparten una verdad común que “no es mía, ni tuya, para que pueda ser tuya y mía”
    (Comentarios al Salmo 103, Il, 11).
  • Crear un clima educativo de cercanía, gratuidad y cordialidad que fomente la alegría del corazón, de modo que los alumnos reciban con agrado los mensajes que se les ofrecen, progresen con paso firme en el proceso de aprendizaje y venzan la falta de motivación y el cansancio.
  • Articular la máxima inclusividad y la adecuada flexibilidad del sistema educativo, de modo que sea posible una cultura comunitaria y de acogida como ejercicio de verdadera solidaridad y de atención real a los alumnos con necesidades específicas y a los excluidos por ideologías e intereses diversos.
  • Iniciar al alumno en la vivencia de la amistad como proceso de apertura a los demás y a la trascendencia.
  • Cuidar la ecología educativa –clima huma-no, instalaciones materiales, decoración de las aulas…- de modo que los alumnos se sientan felices en su trabajo, en las relaciones con profesores, compañeros, personal colaborador y en todas las actividades de la vida del colegio.

 

Nuestra propuesta concreta de educación en valores


Nuestra acción docente y educativa se inspira en una propuesta coherente de valores y expresa un objetivo primordial: que nuestros alumnos no solo aprendan a pensar y a hacer, sino también a ser y a compartir.
Los agustinos tenemos como emblema y logotipo un corazón y un libro. Ambos elementos constituyen el símbolo gráfico de la pedagogía inspirada en el pensamiento de san Agustín. Aprender a ser y a compartir o formulado de otro modo, enseñar a pensary a amar, se presenta como una síntesis genial de la educación agustiniana. El libro y el corazón integrados en una misma imagen.
Aprender a ser y aprender a compartir es tanto como señalar las dos metas de la pedagogía agustiniana, a las que se llega por el camino de una educación en valores que será más persuasiva si se presenta con alegría, en un clima de confianza, benevolencia y adaptación al alumno para acompañarlo en su formación.

 

Valores agustinianos:


 

  • Educar en la INTERIORIDAD, la VERDAD y la LIBERTAD RESPONSABLE para aprender a ser.
  • Educar en la AMISTAD, la COMUNIDAD, la JUSTICIA y la SOLIDARIDAD para aprender a amar y compartir.

 

Nuestra historia educativa en colegios nos permite ofrecer a la sociedad una educación integral para que los alumnos perfeccionen todas sus potencialidades, un sistema de coeducación, una gestión escolar participada por toda la Comunidad Educativa, según lo establecido por las leyes de enseñanza, y una calidad educativa propia, distinguida por los siguientes valores agustinianos.

 

  • Interioridad: fomentando un ambiente que ayude a la reflexión, para que el alumno/a construya desde dentro el desarrollo de su personalidad.
  • Libertad: orientando a cada estudiante a descubrir sus cualidades individuales, perfeccionarlas y ejercerlas responsablemente en el cumplimiento de su propio deber, en solidaridad con el bien común y con respeto y tolerancia a los demás.
  • Sabiduría: ofreciendo a todos los conocimientos de la ciencia, la riqueza de la virtud y el mensaje de la fe.
  • Verdad: estimulando el hábito de la investigación y la búsqueda inquieta de la VERDAD TRASCENDENTE.
  • Amor: viviendo las interacciones educador-educando en un clima de acogida, alegría y espíritu democrático, y como medio facilitador de la enseñanza-aprendizaje.
  • Amistad: ayudando a los alumnos a integrarse socialmente y a realizar el consejo de San Agustín: «En la vida ten amigos. ¡Búscalos!»
  • Comunidad: animando a la Comunidad Educativa a participar en el Colegio con espíritu de CARIDAD y a compartir fraternalmente la CIENCIA, para enriquecimiento mutuo.
  • Inquietud: actualizando al profesorado en contenidos y métodos de enseñanza y haciendo así realidad el pensamiento agustiniano: «En tanto soy buen maestro en cuanto sigo siendo alumno/a.»
  • Bien: posibilitando la autorrealización y el desarrollo integral de nuestros alumnos con servicios y actividades complementarias y extraescolares, atención al «juego infantil», al «tiempo libre» y a la «vida como escuela», como anhelaba San Agustín.
  • Trascendencia: apertura de hombre hacia Dios.” Nos hiciste Señor para ti y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en ti “